jueves, 30 de mayo de 2013

INTRODUCCIÓN AL GNOSTICISMO, La Felicidad

Por Jorge Eduardo Medina Barranco

Breña Baja, mayo 30 de 2013

LA FELICIDAD

Una de las plegarias más reiteradas por las comunidades gnósticas surgidas del gnosticismo contemporáneo nacido en Colombia es: “Que todos los seres sean felices, que todos los seres sean dichosos, que todos los seres sean en paz”. La conozco y la repito casi todos los días desde mi niñez. En nuestros grupos gnósticos hacemos cadenas humanas para pedir por la felicidad de todos los seres.

El 4 de mayo de 1992, en su conferencia del ‘National Tennis Centre’ de Melbourne, en Australia, el Dalai Lama dijo:
 <<Para empezar, permitidme decir que como seres humanos nuestro objetivo básico es el disfrutar de una vida feliz; todos queremos experimentar la felicidad. Es algo natural para nosotros buscar la felicidad. Este es el propósito de nuestra vida>>

La cuarta noble verdad del budismo afirma la existencia del noble camino, el método para extinguir el sufrimiento: El budismo prescribe un método, o camino, con el que se intenta evitar los extremos de una búsqueda excesiva de satisfacción por un lado, y de una mortificación innecesaria por el otro, de forma que podamos vivir esa felicidad que plantea el Dalai Lama como propósito de la vida budista.

Cuando estudiamos el pensamiento occidental, encontramos concepciones básicas del concepto de felicidad que surgen desde la época del pensamiento griego clásico, pasando por el cristianismo y otras filosofías, hasta nuestros días y que pueden enmarcarse en dos conceptos teóricos: ‘eudemonismo’ y ‘anti-eudemonismo’. Como dice Ferrater Mora en su Diccionario de Filosofía: <<La mayor parte de obras acerca de problemas éticos y acerca de la cuestión de la naturaleza del bien tratan de la noción de felicidad>>.

Cuando leemos y estudiamos los modernos libros denominados de ‘autoayuda’, o las técnicas modernas de desarrollo personal, encontramos un fuerte componente de búsqueda de felicidad, coincidiendo con la milenaria afirmación budista de la extinción del sufrimiento como medio para lograr el propósito de la vida: la felicidad.

La conclusión al respecto es que la gente quiere ser feliz o más feliz. No importa si tienen o no tienen credo: todos los seres humanos quieren ser felices. Nuestro  gnosticismo deposita su confianza en esa idea de la búsqueda de la felicidad. Una de nuestras declaraciones más rotundas es que LA FINALIDAD GNOSTICA ES LA FELICIDAD DE LOS SERES HUMANOS SIN DISTINCION. Apostamos por ese logro que no está exento de cierto riesgo, ya que no existen recetas para conseguir la felicidad.

Muchos piensan que hay que perseguir la felicidad, que cuando compren aquello que desean o consigan aquella persona que creen amar o logren aquel sentimiento que buscan desesperadamente por fin serán felices. Personalmente soy de los convencidos que la felicidad no es algo que posees, sino algo que eres: la felicidad procede de nuestro interior, es un estado del ser que no depende de lo que tenemos exteriormente sino de lo que somos y experimentamos interiormente.

Del maestro Samael Aun Weor aprendimos a reflexionar sobre el nivel del ser y su escalera maravillosa (Ver Psicología Revolucionaria). Hay quienes viven en el nivel de ser infelices y hay quienes viven en el nivel de ser felices.

El gnosticismo pretende que seas más consciente de ti mismo, que descubras dónde te encuentras y como ir más allá; en Psicología Revolucionaria dice el maestro Samael Aun Weor: <<Tenemos que anhelar un cambio verdadero, salir de esta rutina aburridora, de esta vida meramente mecanicista, cansona... >> Una forma de conseguirlo consiste en realizar ejercicios de autoobservación.

Una herramienta de autoobservación es reflexionar sobre una pregunta. La pregunta puede ser simple, la calidad de una pregunta no se juzga por su complejidad sino por la complejidad de análisis que suscita. En el ejercicio de autoobservación de la felicidad que te propongo a continuación, anota tus respuestas, pero no gastes más tiempo del necesario. Si escribes lo primero que te venga a la mente, probablemente será lo más próximo a la verdad.

Ejercicio de Autoobservación: Felicidad
¿Qué significa para ti ser feliz?
Piensa en alguna ocasión en que hayas sido feliz. ¿Cómo te sentiste?

En términos de PNL hay un pequeño esquema interesante que también nos ayuda en esta reflexión sobre nuestro nivel de ser respecto de la felicidad:



  Tu felicidad se manifiesta en una serie de pequeñas decisiones que tomas todos los días, decisiones que te hacen, cada una de ellas, ser feliz. La felicidad se vive en los pequeños detalles cotidianos de la vida. No hay forma de perseguir la felicidad. Eres o no eres feliz: sólo puedes ser feliz ahora mismo.

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martes, 14 de mayo de 2013

INTRODUCCIÓN AL GNOSTICISMO ¿Qué es el ‘gnosticismo’?




Hola a todos,  después de un receso de casi seis meses vuelvo a escribir un nuevo tema, el cual espero que sea de su agrado.

El tema que voy a tratar en esta  y en sucesivas entradas, es acerca del gnosticismo como una herramienta de cambio eminentemente práctica en el mundo real, que nos enseña cómo hacer, para saber ser mejores en todos los sentidos: material, mental y espiritualmente.

 El tema se llama Introducción al Gnosticismo y tendrá continuidad con este mismo nombre en una serie de entradas de este blog.

Sin más preámbulos comencemos.


INTRODUCCIÓN AL GNOSTICISMO
Por: Jorge Medina Barranco 14 de mayo de 2013

¿Qué es el ‘gnosticismo’?

A los que les guste la lectura amplia y referencias bibliográficas, pueden ir a los siguientes enlaces Web y encontrar alguna información útil.

Los que deseen una guía práctica para obtener lo mejor de sí mismo y de los demás utilizando las vías del gnosticismo, los invito a un pequeño viaje guiado desde mi experiencia como gnóstico de toda la vida; actualmente tengo 65 años y soy gnóstico desde que mi memoria recuerda porque nací y crecí en el hogar de Julio Medina Vizcaíno (Gargha Kuichines) y he sido el único de sus hijos que se interesó personalmente por este conocimiento desde mi más tierna infancia.

Antes de emprender esta aventura gnóstica a la que les invito, permítanme una pequeña corrección histórica. En 1950 Julio Medina Vizcaíno fue quien publicó el Matrimonio Perfecto escrito por Víctor Manuel Gómez Rodríguez (Samael Aun Weor), no como dice la Wikipedia que fue Gómez Rodríguez el que lo publicó.

Víctor Manuel Gomez Rodriguez y Julio Cesar Medina Vizcaino

 Este pequeño detalle es importante, porque muchos grupos surgidos del gnosticismo samaeliano quieren negar la existencia de este maestro gnóstico sin cuyo concurso no se hubiese conocido la doctrina de Samael Aun Weor. Podrán argumentar lo que les guste para satisfacer su deseo personal, pero los hechos que ocurrieron en el nacimiento del Movimiento Gnóstico samaeliano fueron los que ocurrieron, y no otros.

En el libro Conocimientos, Anécdotas e Historia de la Gnosis en la Era de Acuario, escrito y publicado en 1981 por Julio Medina V., en el capítulo segundo cuenta lo siguiente:

<<Eran tantas las enseñanzas que a diario recibía del Maestro, que en mí bullía el deseo de que otras gentes conocieran aquella sabiduría, y le lancé la idea: “Maestro, por qué no escribe un libro dando tanta clave que usted tiene” y de inmediato me contestó: “Maravilloso, yo tengo la sabiduría y tú el dinero. Tírate la gran parada, unámonos a favor del mundo. Yo los escribo y tú los editas”>>

Todas las primeras obras escritas por el maestro Samael Aun Weor fueron publicadas por el maestro Gargha Kuichines. Sin esta extraordinaria colaboración la enseñanza del maestro Samael no habría sido conocida tal como lo fue.

Los que me conocen desde hace muchísimos años saben que yo no estoy interesado en convertir a nadie al gnosticismo. Que siempre he pensado que el proselitismo es una actitud egoísta y les he dicho a los estudiantes gnósticos que debemos trabajar por la felicidad de todos los seres, no por la conversión de las personas a una creencia distinta. Mi objetivo es presentar conceptos gnósticos que sean aceptables y útiles para todas las personas sin distingos de ninguna clase, creyentes y no creyentes.
 Enseñando La práctica de la meditación en el Jardín Botánico  de la ciudad de  Medellín-Colombia en Agosto de 2012
Durante mi conferencia Inteligencia Espiritual en la ciudad de Bogotá Colombia Agosto de 2012 
Hecho este pequeño comentario, abordemos el tema de la pregunta:

¿Qué es el gnosticismo?

En los tiempos actuales sigue siendo un sincretismo de tipo espiritualista. Sabemos que el término ‘gnosticismo’ proviene del griego Γνωστικισμóς (gnostikismós); de Γνωσις (gnosis): ‘conocimiento’.

Según el diccionario http://www.wordreference.com/ , ‘conocimiento’ significa: 1. m. Acción y resultado de conocer. 2. Entendimiento, inteligencia. 3. Facultad de entender y juzgar las cosas. 4. Conciencia, sentido de la realidad  5. pl. Ciencia, conjunto de nociones e ideas que se tiene sobre una materia.

Y el conocimiento cambia con el paso del tiempo, como todo lo que tiene que ver con la realidad. El gnosticismo del cristianismo primitivo se desarrolló con los conocimientos de su época. El gnosticismo contemporáneo se desarrolla con los conocimientos actuales, porque ‘gnosis’ no es un dogma de fe sino la acción y resultado de conocer.

El gnosticismo trata del cambio. Ese es el fundamento del gnosticismo al que les invito: un viaje de cómo hacer cambios en nuestra vida. Los cambios de nuestra vida se originan en el anhelo de algo mejor. En última instancia, el gnosticismo trata sobre cómo convertir nuestros anhelos de ser mejores personas en realidades concretas; saber ser mejores en todos los sentidos: material, mental y espiritualmente.

El gnosticismo es una herramienta de cambio eminentemente práctica en el mundo real, no una creencia más. Trata con objetivos personales y logros concretos en el mundo real. Conecta el mundo de nuestros anhelos personales con el de las realidades en lo material, lo mental y lo espiritual. Lo que hace falta para realizar esta experiencia es el saber cómo (know how), los conocimientos para andar por el camino gnóstico. Como todo aprendizaje, para iniciarse es conveniente la ayuda de un maestro o mentor.

Pero, ojo, como dice el budismo: aceptar un dogma de cualquier autoridad no conduce a iluminación alguna, porque supone una abdicación de la responsabilidad personal. O, como lo expreso el maestro Samael Aun Weor en su libro Los Misterios Mayores:

<< Nosotros aconsejamos a los discípulos que no sigan a nadie. Que se sigan a sí mismos. Cada cual debe seguir a su resplandeciente y luminoso Ser interno. Nosotros rogamos, suplicamos a nuestros discípulos que no nos sigan. No queremos secuaces ni seguidores. Hemos escrito este libro para que vosotros nuestros amigos, escuchéis a vuestro propio maestro interno, a vuestro resplandeciente YO SOY. Él es vuestro maestro, seguidlo a ÉL. >>

Obviamente, ya lo hemos dicho, para aprender hace falta quien nos enseñe, pero una vez aprendido es nuestra responsabilidad personal andar el camino.

Mi tarea será enseñarles lo que he aprendido en mi viaje, y los que lo deseen puedan emprender el suyo.